Los chilenos fuman “caleta” (en Klammern: bastante)
Que se te olviden sin querer palabras como Klammern (comillas en alemán) y que intentes recordar y la palabra que se te viene a la mente sigue siendo Klammern, memoria del terror.
Por qué hace tanto frio adentro? …ah es que las ventanas son más delgadas y ya apagamos la estufa.
Puta que rica la paleta de la Ligua hueón oh!, esa con manjar con lúcuma.
> Señor colectivero, cuando salimos? 🙂
> Cuando se llene
> -_-
Puta que hay hoyos en la calle!
Algunos medios de comunicación son harto fachos, demasiado!
Saqué la cuenta y comí paltas todos los días, a veces dos veces por día.
Dame otra paleta manjar lúcuma porfi!
Que chistosos los perros callejeros sentados en medio de la calle, cero intención de moverse!
Hay caleta de gente de pelo negro!
Qué dulce la Sprite! qué dulce todo!
> Usted prefiere tinto o blanco?
> Un tintieli porfa
> Usted sabe poh, echando a perder se aprende
> No me vengai a vender la pomá!
Que gran cantidad de dichos y chilenismos, ni nos damos cuenta de tanta cosa propia que tenemos. Dejar de oírlos significa también identificarlos rápidamente. Como que uno se enamora de esa identidad entretenida.
Que mejor manera de hacerse unas monedas que guitarrear un par de canciones en la micro!
Lástima, no me quedan más monedas, se las di al último artista callejero que se subió.
Ese caos vial me asombra. Los peatones cruzan con rojo, los perros callejeros persiguen los autos, el micrero se tira encima sin señalizar y se detiene en diagonal para recoger un pasajero y por último hay que esquivar hoyos gigantescos para salvar los amortiguadores de una muerte prematura.
Llegué a las 20:09 a juntarme con una amiga, me sentía más atrasado que la chucha. Ella llegó a eso de las y media, plop! Ahora, sólo a reírse de uno mismo y de la cultura.
Después de la conversación previa, la pregunta típica:
> No extrañas? Cuando te vai a venir?
Que soledad, y bueno, mi vida no está acá, camino por las calles y tantas cosas me parecen desconocidas, la gente, los nuevos edificios, incluso las palomas. Hasta que de repente uno se da cuenta que mucho ha cambiado, pero que todo sigue igual…